De alguna manera Tendré que Olvidarte





"De alguna manera tendré que olvidarte, por mucho que quiera no es fácil, ya sabes.

Me faltan las fuerzas, ha sido muy tarde, y nada más, y nada más"

Luis Eduardo Aute


Afrontar una ruptura sentimental es un proceso muy doloroso que implica pasar por un periodo de duelo, pues al fin y al cabo significa perder a un ser querido. Además, el sufrimiento no es proporcional al tiempo que haya durado la relación, depende sobre todo del grado de enamoramiento o dependencia creado en la pareja.

Decir adiós puede ser realmente duro (ya seas tú quien ha tomado la decisión o lo haya hecho la otra persona), hay que readaptar la vida que se había creado y replantearse objetivos, ilusiones y darle un lavado de cara al día a día. El problema es que a veces añadimos más sufrimiento y alargamos el dolor de forma innecesaria cuando nuestra mente distorsiona lo sucedido y le añade una carga extra de dramatismo y malestar.

“Si hubiese hecho las cosas diferente no me habría dejado”, “No puede hacerme esto, necesito saber por qué”, “No voy a encontrar a nadie como él/ella, me quedaré solo/a”… ¿te suenan?, son pensamientos muy frecuentes cuando se termina una relación y van acompañados de culpabilidad, sentimiento de abandono, inseguridad, impotencia, tristeza y además tambalean la autoestima. ¿Qué puedes hacer cuando te descubras pensando así?. Plantea argumentos a favor y argumentos en contra de ellos y después encuentra para cada uno un pensamiento alternativo más racional y equilibrado, que te ayuden a ir asimilando lo ocurrido.


Pongamos algunos ejemplos de cómo olvidarte:

“No soy suficientemente atractivo/a (física o personalmente) por eso no he conseguido que siguiera enamorado/a de mi”: el amor depende en parte de atracción mutua, afinidad, admiración…, aunque hay otros factores que también influyen, como la actividad cerebral y la acción química de hormonas y neurotransmisores así como nuestro sistema de creencias, experiencias previas, gustos, necesidades que pueden hacer que nuestra parte más reflexiva nos diga que aunque esa persona nos atrae no nos complementa.

Pensamiento alternativo: Son muchos los factores que influyen en que una pareja se consolide y perdure o no, y no soy yo la única causa. Además, mi valor y atractivo es independiente de mi situación sentimental, ni me lo da ni me lo quita otra persona

“¿Por qué la gente encuentra a alguien para formar su familia y yo no?, no es justo”: Es cierto que algunas personas comparten su vida juntas y disfrutan la convivencia la mayor parte del tiempo, pero ni esto le sucede a todo el mundo ni tener una pareja es cuestión de que unas personas lo merezcan y otras no
Pensamiento alternativo: me hubiese gustado que esta relación funcionase a largo plazo pero no ha podido ser, a veces la vida responde a nuestros deseos y otras veces no. Y, para ser realista, no soy la única persona que se encuentra en una situación así

“No soy capaz de superarlo”: está resultando más doloroso de lo que pensaba pero ni el dolor viene con una fecha de caducidad determinada ni el que lo que he intentado hasta el momento no me haya funcionado como esperaba significa que no haya cosas que yo pueda hacer para acelerar el proceso, quizás tengo que probar otras alternativas aunque al principio me cueste.

Pensamiento alternativo: si noto que me cuesta demasiado no tengo por qué conseguirlo solo/a, lo más inteligente puede ser recurrir al apoyo de familia y amigos o incluso a un acompañamiento psicológico

“Es terrible que me rechacen, no lo soporto”: a nadie le gusta sentirse rechazado/a pero soy consciente de que no puedo exigir gustarles a otras personas como me gustan a mí, y viceversa. Durante la vida he repetido situaciones de este tipo (cuando me despidieron de aquel trabajo que me encantaba, cuando aquella amiga dejó de hablarme, aquella otra pareja con la que también estaba ilusionada) y las he ido superando, unas con más esfuerzo que otras. Al principio las sensaciones son más intensas pero sé que poco a poco todo termina poniéndose en su sitio
Pensamiento alternativo: es doloroso sentir el rechazo, pero es un sentimiento normal en determinadas situaciones, que ya he experimentado más veces y que sé que puedo superar y dejar atrás

“Es un/a miserable/fascinante…”: mi dolor me hace centrarme en algunas de sus características e ignorar otras. Ni es cierto que sólo tuviera cualidades para admirar ni lo es que sea una mala persona a la que merezca la pena odiar

Pensamiento alternativo: somos la suma de muchos comportamientos. Ver a la otra persona de forma realista, con sus luces y sombras, me ayuda a suavizar mi resentimiento y/o a no idolatrarla

“No voy a encontrar a nadie más”: cierto que cada persona es única y cada relación también, pero igual que no pude prever que aparecería esta persona en mi vida, tampoco puedo estar 100% seguro/a de que no volveré a enamorarme ni a encontrar alguien con quien me apetezca vivir y compartir


Pensamiento alternativo: No voy a jugar a adivinar el futuro porque me puedo equivocar. Prefiero dejar que la vida me sorprenda


Pistas
No vas a lograr eliminar la tristeza y el sentimiento de vacío de un plumazo, la realidad es que ahora toca estar triste. Pero no cedas el control de tus emociones, mantén las riendas. Es normal llorar, echar de menos, sentirse solo/a, decepcionado/a… pero no aumentes la intensidad ni la duración de estas emociones. No las conviertas de normales a dañinas. No te tortures con preguntas que no tienen respuesta, no te faltes al respeto suplicando un amor que sabes que ya no van a darte, no te castigues persiguiendo su contacto por las redes sociales, no añadas sufrimiento a tu dolor olvidándote de ti

Tienes que darte un tiempo, superar una ruptura es un proceso complicado, pero durante ese periodo tienes que ser valiente y negociar contigo los pequeños pasitos diarios que poco a poco te van a sacar del dolor y te van a hacer recuperar el equilibrio, la calma y el bienestar. Esto requiere un compromiso activo por tu parte. Plantéate cada día un objetivo y cúmplelo. Sin excusas, sin decirte que no puedes. Animándote a llevarlo a cabo con amabilidad, con cariño, sabiendo que es lo mejor para ti

Cuando un amor se rompe tendemos a distorsionar lo que ha sido, nos convencemos de que era lo que nos mantenía en pie, lo único que merecía la pena. Nos olvidamos de que la pareja es sólo una parcela de nuestra vida. La superación es complicada, pero también liberadora y gratificante

Idea clave

Si estás pasando por una ruptura de pareja no te olvides de salvar la relación más importante: la que mantienes contigo mismo/a.

Fuente: psicoemocionate.com

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Estoy entre mis ganas de tener pareja y amo mi soltería.

11 frases de Mario Benedetti para un corazón roto

Divorciada, sola y feliz