Enamórate las veces que sean necesarias… Hasta que te salga bien


Enamorarse es una de las experiencias más enriquecedoras que podemos vivir, pero muchas veces por traumas de nuestro pasado e inclusive por vivencias que ni siquiera nos pertenecen, asumimos cualquier cantidad de bloqueos que no nos permiten darnos la oportunidad de enamorarnos a plenitud e inclusive podemos llegar a bloquearnos a cualquier relación que nos exponga a los riesgos que trae consigo el enamorarnos.

Ninguno de nosotros tendrá nunca el éxito garantizado en el amor, ni siquiera porque hagamos las cosas de la mejor manera posible, pero demos de nosotros lo mejor y hagamos lo que consideramos necesario para que nuestra relación funcione, podremos asegurar que tendremos un desarrollo particular.

Todos estamos expuestos al riesgo de que las cosas no se den como las quisiésemos, que la persona de quien nos enamoramos, no nos retribuya, que nos engañen, que nos enamoremos de alguien que cambie tanto que no lleguemos a reconocer o que sencillamente no fue como creíamos. Corremos el riesgo de dejar de sentir, de perder el impulso y dejar de intentar. Corremos el riesgo de dejar de mirar de manera compasiva a al otro y someterlo a nuestros juicios y críticas. Corremos el riesgo de enamorarnos de alguien más y lanzarlo todo por la borda.

Pero eso es parte del amor, si nuestro corazón no se llega a acelerar por alguien más, si no sentimos que nos falta el aire sin una persona en particular, si no llegamos a sentir que nos duele el alma ante una decepción, nos habremos perdido de una de las experiencias que más vivos nos hace sentir.

No te preocupes por si saldrá bien o mal, agradece la oportunidad que tienes de vivir el amor, de conocer a personas especiales que logren dejarte algo de ellos y quienes puedas dejar algo de ti. Hazlo lo mejor que puedas, entrégate sin reservas, sin miedos a que saldrás lastimado. No importa si no ha resultado anteriormente, ninguna persona es igual a otra y las relaciones y sus desenlaces no tienen por qué serlo.

Abre tus canales, activa la energía del amor en tu vida, está dispuesto a dar lo mejor de ti… Inclusive si lo tienes que hacer varias veces… Al final la vida puede resumirse en cuánto amaste y cuánto te amaron, así que no te resistas, la vida se trata de eso, de amar, de aprender, de crecer, de rearmarnos y seguir amando, las veces que sean necesarias, porque si no nos cerramos al amor, sino que seguimos confiando y seguimos dando de nosotros lo mejor, sin darnos cuenta, más pronto que tarde estaremos viviendo el amor que deseamos y tendremos lo necesario para mantenerlo en nuestras vidas.

Fuente: Sara Espejo – Mujer.Gurú

Comentarios

  1. Me encantó excelente estoy pasando algo así y este artículo me iso sentir muy bien

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