La soledad del hombre no es más que su miedo a la vida


La soledad del hombre no es más que su miedo a la vida (Eugene O’Neill)


Literalmente "estar solo" significa estar sin compañía, no obstante, cuando hablamos de “sentirnos solos" nos referimos al sentimiento de estar aislados, de incomprensión o desconexión, de sentir que no tenemos a nadie que nos entienda.

Hay que tener en cuenta que el ser humano es un animal social. Estamos programados genéticamente para vivir en comunidad, el apego es una necesidad básica y fundamental en nuestra primera infancia de hecho determina nuestro desarrollo emocional posterior. Hay numerosos estudios sobre la Teoría del Apego de Bowlby que demuestran la importancia de un patrón de apego seguro en la infancia.

Aunque podríamos vivir como ermitaños, o sin contacto con otras personas, no estamos programados para ello. Nuestro instinto de supervivencia nos dice que es peligroso quedarse al margen del grupo: es decir, tus genes te hacen sentir que estás en peligro si te desconectas de los demás, de ahí la sensación de ansiedad ante la soledad según los estudios del recientemente fallecido John Cacioppo, uno de los máximos estudiosos del tema junto a su mujer, Stephanie. Así que genéticamente estar solos mucho tiempo nos causa ansiedad.

Pero eso no significa que no podamos lograrlo, aprender a pasar tiempo con nosotros nos ayudará a establecer mejores relaciones con los demás, ya que nos conocemos más y sabemos cuáles son los límites, así como la elección de estar con alguien o no sin necesitarle.

Para que dejemos de temerle a la soledad primero tenemos que cambiar su significado, la soledad parafraseando al principito, debe entenderse como un tiempo para estar con nosotros desconectándonos por un momento del mundo y reflexionar sobre el camino que queremos seguir cuando algo ya no está funcionando, para nuevamente retomar el rumbo y volver a contactar con las personas de nuestro al rededor y porque no también integrar nuevas personas.

La soledad es ese momento que te regalas para ponerte en contacto contigo, con lo que te duele, con lo que necesitas llorar y no contarle a nadie más, aprender a conocerte y cuidar de ti, no la veas como tu enemiga sino como tu aliada para no permitir que los demás te lastimen. Podrás perder a muchas personas a lo largo de tu vida peor solo hay una que te acompañara por el resto de tu vida y esa persona eres tú mismo, así que mejor aprender a disfrutar de nosotros y no depositar nuestra felicidad en las manos de otra persona.


Con amor:









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