Actitudes que demuestran que has superado a tu EX
Dejar atrás a una persona que fue importante para ti y con la cual tenías grandes sueños lleva tiempo, uno no sana de la noche a la mañana, recorres el camino del duelo y a veces sientes que no podrás seguir adelante, pero la verdad es que siempre se puede, cuando uno se compromete consigo mismo y escucha su dolor, siempre te puedes volver a levantar.
Pero es
importante que antes de dar por sentado que lo dejaste en el olvido te tomes un
tiempo para analizar cómo te sientes en realidad, sobre todo si está en tus
planes iniciar una nueva relación, más vale librarse de toda emoción negativa y
poder formar una relación sana y duradera:
- Dejó de dar vueltas en tu
cabeza. Lo más desesperante de un duelo es no poder dejar de pensar en esa
persona estemos en donde estemos, hacemos grandes silencios, nos
desconectamos del mundo tratando de entender que sucedió y soñando con su
regreso. Cuando deja de importarte los pensamientos repetitivos
desaparecen, eso no significa que te olvides de esa persona, pero ya no está
presente en cada minuto que pasa, logras controlar esos pensamientos y
cuando lo recuerdas no te duele, puedes continuar con tu rutina.
- Dejas de esperarle. Admítelo,
podrás decirle al mundo que ya no te importa, pero cuando aún sientes
cosas por una persona siempre esperas su regreso. Pero un día te cansas,
dejas de mirar a la puerta, el teléfono, de imaginar que le dirías si
vuelve y sigues adelante.
- Te arreglas y preocupas por
tu cuerpo. Muchas veces cuando la tristeza se apodera de nosotros dejamos
de darle importancia a nuestra apariencia física, te descuidas y como es
en exceso. Pero cuando el dolor ha pasado comienzas poco a poco a
arreglarte, hacer ejercicio y mejorar tu guardarropa.
- Sales con tus amigos frecuentemente.
Sin duda el dolor nos hace alejarnos de las personas que queremos, nos
negamos a aceptar la realidad y no queremos que nos toquen la herida. En algún
momento de todas esas lagrimas comienzas a sentir la necesidad de ir por
un café, a tomar una cerveza, escuchar música y divertirte un rato, es
inevitable la sonrisa que te provocan tus amistades es la mejor terapia.
- No tienes miedo de volverte
a enamorar. Sin duda al estar heridos el solo hecho de pensar en alguien
nos provoca malestar porque solo quieres estar con tu expareja, pero
cuando has dejado atrás el dolor y ya no te importa si regresa
inevitablemente el amor vuelve a tocar a tu puerta, porque puedes darte
cuenta otra vez cuando le gustas a alguien y sabes bien que si te
levantaste de ese dolor puedes con todo y no tienes miedo de volverte a
enamorar.
- No lo odias. Este es un
punto decisivo, cuando estamos dolidos muchas veces confundimos esta
tristeza con enojo y le deseamos lo peor a esa persona. Pero cuando has
entendido tu dolor, cuando te das cuenta que no has perdido nada entonces,
ese odio, enojo, resentimiento que sentías desaparece, puedes perdonar las
heridas hechas y aceptar tu cuota de participación en los hechos y
continuar adelante.
Enamorarse
es una de las experiencias más hermosas pero también de las más dolorosas, pero
cuando uno se da cuenta que esa persona por más especial que sea no nos
pertenece, cuando te das cuenta que todo ciclo termina pero que tu vida
continua, es entonces cuando aprendes a amar y no a depender, a soltar y a ser
feliz, porque te das cuenta que el amor te pertenece todo el tiempo a ti y que
eres capaz de perder y de volverte a levantar. Con amor:
Comentarios
Publicar un comentario