Siempre hay personas dispuestas a aceptarnos tal y como somos

Siempre está disponible en la generosa fuente dentro de nosotros.

La verdad es así, jamás nos falta el amor, siempre hay personas dispuestas a aceptarnos tal y como somos, que no le importan todos nuestros demonios, nunca dejan de amarnos, de aceptarnos, porque no nos quieren por ser buenos con ellos, nos aman por el simple hecho de existir.

Pero a veces estamos tan inmersos en lo que perdimos que no podemos verlo, dime si en medio de tu dolor no has escuchado a tu familia, a tus amigos darte su apoyo, que te han abrazado y recibido con los brazos bien abiertos para darte todo el amor que necesitas.

Me tomó tiempo darme cuenta de ello cuando me divorcié, pero es que tenía tanto miedo que solo contemplaba dos opciones en mi vida de ese momento, y eran: estar enamorada y feliz o con el corazón roto por su ausencia. Sentía que nada ni nadie podía llenar el vacío que su ausencia me dejaba.

Lo que sucede es que está deteniendo activamente el amor de los demás porque hemos aprendido a través de nuestra educación que se necesita que alguien "nos elija" para sentirnos amados.

Pero hay tantas formas de amar que nos dan tanta felicidad y no sabemos disfrutar. Eros es el tipo de amor que te lastimará cuando termine tu relación romántica. A medida que el eros duele, puedes elegir cultivar filia, amor en amistad; amor en familia; ágape, amor desinteresado, universal, así para nuestro mundo y lo divino; y mi favorita, philautia, amor propio.

Y yo opté por nutrir cada uno de ellos. Mis amistades que tenía en el abandono, mi familia que deje de ver porque vivía en otra ciudad, mi espiritualidad, y sobre todo comencé a notar todas las cosas que amo de mí misma.

Comencé a cuidar de mí, de mi salud, tanto física como mental, empecé a trabajar en terapia, a comer mejor, hacer ejercicio, hasta que poco a poco mi autoestima fue mejorando día con día y empecé a invertir en mi crecimiento profesional.

La verdad es que cuando volteé a mirar al pasado, la chica del corazón roto que creía que nunca se levantaría ya no existía. La había procurado tanto que se convirtió en mi mejor versión y esa persona que me lastimo dejó de importarme, ni siquiera podía verme ya al lado de alguien así.

Y es entonces cuando lo entendí, nunca, nunca me faltó amor, lo que pasa es que estaba tan cegada que no podía verlo, no podía darme cuenta de lo afortunada que soy en la vida. De tener a tantas personas que me aman tal cual soy, pero sobre todo lo afortunada que soy por aprender a quererme y darme cuenta de lo hermosa que puede ser mi sonrisa cuando no depende de alguien más que no sea mi propia felicidad.

Estoy enamorada y no es el amor romántico que nos enseñaron. Estoy completamente enamorada de la vida. 😉

Con amor:


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Para curar una herida, debes dejar de tocarla

Divorciada, sola y feliz

11 frases de Mario Benedetti para un corazón roto