Te amo, pero no te quiero más en mi vida



Después de que te rompen el corazón en mil pedazos aprendes a cuidar de ti. Esa voz interna se vuelve en una guía en tu camino, y si bien después de un largo tiempo de sanación, de haber recorrido tu propio camino, el amor regresa, estás consciente de todo lo que ocurre, aprendes a amar con los ojos abiertos.

Y este amar con los ojos abiertos implica ser consciente de cada decisión que tomas aún cuando no lo pareciera. Conforme te involucras con otra persona te das cuenta que vuelves a sentir, y el saberlo, saber que puedes volver a amar, da una tranquilidad inmensa cuando creías que no te volverías a enamorar nunca más.

Esta carta es para ti que estás pasando por una relación complicada:

La verdad es que me enamoré, y cuando me di cuenta de ello disfruté cada momento, cada detalle a tu lado. Me sentí digna de amor, de un amor que creía perdido, y es que lo que más me hizo sentido fue que te fijaras en mí, justo cuando yo sentía que era la peor versión de mí. Me miraste, me aceptaste tal y como era sin condiciones y eso me hizo recuperar la fe en el amor que creía perdido.

Si bien los dos teníamos una vida completamente opuesta, nos dimos este espacio. Un espacio que nadie podía tocar, que solo nos pertenecía a los dos y quizás solo eran momentos en medio de todo el caos, pero eran momentos tan necesarios para darle sentido a todo, me sentía acompañada, escuchada, y de alguna manera querida.

Gracias a esas emociones comencé a ver la vida desde otro aspecto, comencé a crecer como nunca antes en mi vida, pensaba que si alguien más me aceptaba significaba que yo también era valiosa, y poco a poco te quite ese peso y me lo apropie, me di mi propio valor para continuar con mi camino y llegar tan lejos como yo quería.

Pero un día me di cuenta que no ibas a mi lado, te quedaste atrás en tu propio mundo y ese mundo ya no me incluía. Después de sentarme un rato a entender que sucedía me di cuenta que la verdad es que muchas de las cosas que yo veía en ti, eran realmente mías, me di cuenta que no eres capaz de expresar tus sentimientos y que solo estabas ahí pero no me dabas nada, al menos nada que yo necesitara.

Y me di cuenta que tenía que tomar una elección, seguir mi camino o sentarme a esperar a que me quisieras como yo merezco. Noté que había crecido tanto que ya no podía conformarme con los ratos de compañía que me dabas, necesitaba más, y no hablo del tiempo juntos, sino de la calidad de pareja; alguien que no solo estuviera, sino que me hiciera sentir que le importo y que no tenga miedo de decirme que me quiere y lo importante que soy en su vida.

Hoy con todo el dolor en mi corazón puedo decirte que te quiero, y que me encantaría que fueses tú. Siempre quise que así fuera, pero por mucho que te quiera y que me gustes, ya no estoy dispuesta a conformarme con migajas, eso ya me costó mucho dolor. Y sé que aunque ahora me duela irme, el dolor de perderte jamás se comparará con el dolor de quedarme al lado de alguien que no me ama como merezco.

Pues si eligiera eso, estaría eligiendo conformarme y limitando mi capacidad de recibir, porque así como yo doy espero recibir. Hoy con todo el dolor en mi corazón, y con lágrimas en los ojos te digo:

Te amo, y agradezco todo lo que me has dado, pero no te quiero más en mi vida.

Después de tantas lágrimas, encontrarme a mí misma es la cosa más maravillosa que me pudo suceder y no estoy dispuesta a renunciar a ello por una compañía que me aleja de mí. Quiero alguien con quién compartir lo que ya soy, no renunciar a mi para seguir a tu lado.

Si tú estás pasando por una situación parecida, recuerda siempre que por mucho que quieras a alguien, si esa relación te hace sentir insegura/o, si te hace sentir triste, entonces no es una relación de amor, y es momento de cuestionarte si quedarte a recibir migajas es más valioso que tu misma/o.

Con amor:



Comentarios

  1. Gracias eres muy hermosa, te valoro tus palabras y el tiempo que te diste darnoslas, casi me desahogo aqui contigo neta eres una mujer maravillosa!

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Estoy entre mis ganas de tener pareja y amo mi soltería.

11 frases de Mario Benedetti para un corazón roto

Divorciada, sola y feliz